Siempre se ha dicho que la historia la escriben los vencedores. Y quizás por eso, el pasado islámico de Madrid no es muy conocido y tan pocos vestigios de la época han llegado hasta nosotros. Pero lo cierto es que Madrid es la única capital europea fundada por musulmanes. ¿Lo sabías? Lo que seguro que sí sabías es que su nombre en árabe era Mayrit, que significa «abundacia de agua».
Mayrit fue fundada alrededor del año 865 en lo alto de un gran promontorio situado junto a un río con la intención de defender Al Andalus, que llevaba ya un par de siglos en guerra con los cristianos. Su fundador fue Mohamed I de Córdoba, que seguro que no podría imaginar que aquella población que fundaba en la línea fronteriza, como tantas otras, se acabaría convirtiendo en una próspera ciudad capital de un país.
Bueno, igual tampoco sabía lo que era un país, con el concepto que conocemos hoy en día. Y desde entonces, el alcázar construido en el mismo lugar que hoy ocupa el Palacio Real, sirvió para defender los intereses musulmanes hasta que en 1085 fue conquistada, sin oposición, por los cristianos tras la caída del reino taifa de Toledo, al que pertenecía.
La ruta por el legado musulmán de Madrid
Vale, sí, vamos a lo importante. A lo que has venido aquí. Ahora que ya te hemos puesto en contexto histórico toca comenzar a caminar por el Madrid islámico descubriendo su pasado a través de los pocos restos que hoy se conservan. Por eso, quizás, nadie relaciona Madrid con los árabes igual que se hace con Córdoba, Granada, Toledo o Sevilla, por ejemplo, pero con esta ruta descubrirás la importancia histórica que tuvo la ciudad en la época y sus orígenes.
La muralla árabe
La muralla árabe de Madrid es posiblemente el mayor vestigio que podamos encontrar y por eso aquí es donde vamos a empezar nuestra ruta. Para ello nos dirigeremos a la Puerta de la Vega. ¿Y esa cuál es? Pues ahora mismo ya no existe pero era quizás la principal puerta de entrada situada en la que hoy es la Cuesta de la Vega, el camino que te llevaba desde el río hasta la ciudad fortificada.
Y tras subir la cuesta, llegas al Parque del Emir Mohamed I (estaba claro qué nombre ponerle) donde se encuentra el monumento más antiguo de Madrid que aún se conserva. Bueno, se conserva parte, todo hay que decirlo, pero aquí está el origen de Madrid. Tras sus muros comenzó a desarrollarse esta ciudad, resistiendo a cada asedio que sufrió durante 200 años.
La muralla no era continua como puedes esperar para encerrar dentro una ciudad sino que una de sus partes era en realidad el muro del Alcázar. Medía casi 1 km y tenía 3 puertas para acceder a su interior. Una lástima que ninguna de ellas siga en pie. Pero afortunadamente este trozo de muralla sí que está en pie, aunque se confunde con los bloques de pisos que hay a su lado en una imagen un tanto curiosa, con uno de los bloques incluso cortando la muralla en dos.
En el Parque del Emir Mohamed I tienes también unos paneles informativos donde te hablan de la historia de la muralla y te explican lo que ves e incluso donde hay una maqueta del Madrid islámico. No dejes de prestar atención también a la fuente en forma de estrella que hay en el parque.
Otros restos de la muralla árabe
Lo que poca gente sabe es que además de los restos anteriores, situados junto a la cripta de la Catedral de la Almudena, en Madrid podemos ver otros restos, mucho más pequeños, pero que también son igual de importantes. Ahora, nos vamos a buscarlos contigo porque no se encuentran muy lejos aunque algunos no están muy accesibles.
Tras salir del parque, rodeado por la parte sur, desde donde además tendrás otras vistas de la muralla y camina por la Cuesta de Ramón, una calle muy poco conocida y transitada en dirección al Viaducto de Bailén. Cuando llegues justo a él verás la entrada del garaje de uno de los bloques que te contábamos antes. Pues justo ahí verás otro trozo de muralla. Realmente increíble pero cierto. Y dicen que en el interior del edificio hay más pero es una finca privada y no se puede visitar.
Ahora cruza el Viaducto de Bailén por debajo cerca de sus arcos (siéntete importante porque esto no lo ha hecho ni el 90% de los madrileños) y sigue caminando subiendo las escaleras en dirección a la Plaza de Oriente para entrar en su parking. Sí, en el parking y no para coger un coche sino porque allí está la Torre de los Huesos, una de las numerosas torres que existían en la muralla (había una cada 20 metros) y que fue descubierta durante la construcción del aparcamiento.
Otro lugar donde encontrarás restos de la muralla es en la Galería de las Colecciones Reales. Lo malo es que tendrás que entrar para verlos. Bueno, lo malo porque estamos en una ruta por el legado andalusí de Madrid pero sin duda visitar la Galería es una actividad muy recomendable. Además de unos fragmentos de muralla de unos 40 metros también podrás ver restos de algunas casas árabes. Están tras unos cristales pero se ven perfectamente.
Junto al Viaducto de Bailén, se encuentra un muro de granito en el que se puede admirar el escudo más antiguo que se conserva de Madrid. En él se pueden observar el oso y el madroño y es un gran desconocido incluso para los madrileños.
La Mezquita Mayor de Mayrit
Nos vamos hasta el siguiente destino, pero no esperes ver una mezquita completa. Como te hemos dicho, los restos árabes que tenemos en Madrid son muy pocos y además lo habitual cuando los cristianos conquistaban las ciudades era construir una iglesia donde estaban las mezquitas. Pero es que en este caso, ni siquiera podemos encontrar la iglesia.
Lo que sí puedes ver son las cimentaciones de la que fue la Mezquita Mayor, que se encuentran en una pequeña calle que sirve de atajo para ir de la Calle Bailén a la Calle Mayor. Están bajo una cristalera y para el que no se sitúe seguro que sabrá dónde es cuando le digamos que es junto a la estatua de bronce de un señor que parece admirar estos restos. Su nombre es «El vecino curioso» y no son pocos los que se hacen fotos con él.
Con la conquista cristiana la mezquita se reconvirtió en la Iglesia de Santa María de la Almudena, que estuvo allí hasta 1868 cuando se derribó para construir las calles Bailén y Mayor. Increíble lo que se hacía en otras épocas que hasta derribaban iglesias para hacer calles. Algo impensable hoy en día. Y eso que durante un tiempo se pensaba convertirla en catedral.
En Mayrit seguramente había varias mezquitas, una de ellas en el interior del alcázar para uso exclusivo de los soldados de su interior, pero la Mezquita Mayor era el principal centro religioso de la ciudad. A su lado estaba la Puerta de la Almudena, otro de los accesos al recinto amurallado.
Los arrabales de la Madrid islámica
Ahora toca abandonar la Almudayna (para quien no lo sepa es el recinto amurallado de una ciudad musulmana) y visitar lo que en su día fueron los arrabales de Mayrit. Por cierto, ¿sabías que de Almudayna procede el castizo nombre de Almudena? Ya sabes otra cosa nueva.
En Mayrit había varios arrabales que fueron creciendo alrededor de las 3 puertas de acceso al interior de la muralla que finalmente se acabaron fusionando. En este recorrido vamos a «salir» por la Puerta de la Almudena, y comenzar a recorrer la Calle Mayor hasta la Plaza de la Villa para finalmente adentrarnos en lo que hoy es el Barrio de La Latina. Y ahora comprenderás qué tiene que ver La Latina con el Madrid islámico.
Casa de los Lujanes
En la Plaza de la Villa hay varios puntos de interés siendo una de las plazas más históricas de Madrid. Pero en este recorrido por la Madrid islámica tienes que dirigir tu mirada al edificio de tu izquierda, del que destaca una gran torre, la Torre de los Lujanes. ¿Y qué tiene que ver esta casa con Mayrit? Realmente no mucho porque se construyó en el siglo XV pero nos va a servir de transición desde el Madrid islámico al Madrid mudéjar.
Y es que esta era la zona en la que vivieron los mudéjares tras la conquista cristiana y donde por tanto podemos ver varios elementos de arte mudéjar siendo la Casa de los Lujanes el primer exponente de este estilo arquitectónico.
Iglesia de San Pedro el Viejo
Desde la Plaza de la Villa sales por la Calle del Codo, continúas por la Calle del Cordón y llegas a la Calle Segovia, desde donde ya divisarás una alta torre con un inconfundible estilo mudéjar. Dirígete hacia allí porque es la Iglesia de San Pedro el Viejo, uno de los templos más antiguos de la ciudad y que se encuentra en el corazón de la Morería.
La iglesia fue construida en el mismo lugar donde se encontraba la mezquita de la Morería (ya lo hemos dicho, iglesias sobre mezquitas) y su torre mudéjar data del siglo XV y esta iglesia ha sido testigo de importantes acontecimientos como la proclamación de Juana de Castilla, llamada La Beltraneja, como heredera al trono.
Más al norte de la Plaza de la Villa, si te desvías un poco de esta ruta, se encuentra la Iglesia de San Nicolás, también con una gran torre mudéjar y que se considera la iglesia más antigua de Madrid aunque se disputa este honor con la Ermita de Santa María la Antigua que se encuentra en Carabanchel.
La Plaza de la Paja
A pocos metros de la Iglesia de San Pedro el Viejo se encuentra una curiosa plaza que se encuentra construida con una cierta inclinación y que parece escalonada. Se trata de la Plaza de la Paja, otro de los lugares más importantes de la Morería. Y es que en este lugar se celebraba el mercado, el zoco, entre los siglos XIII y XV. Fue sin duda el centro neurálgico de Madrid durante este tiempo. Era la Puerta del Sol de la época.
O la Plaza Mayor, que fue a donde se trasladó posteriormente este mercado ganando en importancia y dejando la Plaza de la Paja en cierta decadencia durante los siglos posteriores. ¿Te imaginas la actividad comercial que habría en esta plaza entre mudéjares y mozárabes?
No es musulmán ni es de la época pero en la Plaza de la Paja no te pierdas los bonitos Jardines del Príncipe de Anglona a los que se accede tras una pequeña puerta que nada te hace pensar que tras ella hay unos jardines tan bonitos.
La muralla cristiana de Madrid y el Museo de los Orígenes
En el año 1085, el rey Alfonso VI de Leon y Castilla conquista Toledo y con ella todas las ciudades que pertenecían a su taifa, entre ellas Madrid, que no opuso resistencia. En todo caso, los musulmanes continuaron viviendo en la ciudad en armonía con los cristianos que comenzaron a repoblarla procedentes del norte. Lo hicieron en la Morería Vieja, en lo que hoy conocemos como La Latina y que parte ya has recorrido antes.
Y con la llegada de los cristianos y el posterior crecimiento de Madrid, se levantó una nueva muralla con mayor perímetro que encerraba en su interior la Morería Vieja. Era la segunda muralla de Madrid, la muralla cristina, de la que hoy en día también quedan muy pocos restos pero que puede recordarse gracias al nombre de algunas de las plazas de la zona de La Latina.
Una de ellas es la Plaza de la Puerta de Moros, donde se encontraba una de las puertas de esta muralla cristiana del mismo nombre y justo al lado de donde se encuentra el Museo de los Orígenes de Madrid, Este será el último de nuestros destinos de esta ruta por la Madrid islámica porque allí descubrirás muchos detalles sobre eso mismo, los orígenes de Madrid. Fue además, la casa de San Isidro Labrador, el patrón de Madrid, que nació cuando la ciudad todavía estaba bajo dominio musulmán.
¿Quieres saber más sobre el pasado islámico de Madrid?
Con este recorrido que te hemos contado aquí te hemos llevado por las huellas islámicas del antiguo Mayrit para que te hagas una idea de cómo era la Madrid islámica. Pero desgraciadamente hay pocos restos y hay que tirar de imaginación. Con lo que te hemos contado te puedes hacer una idea de cómo era la vida en el siglo IX y posteriores en la ciudad pero hay que tirar mucho de imaginación.
Si no te valen nuestras explicaciones, siempre puedes hacer este free tour por el Madrid islámico y medieval en el que te contará muchos más secretos de los que te hemos contado aquí.
Si quieres aprender más sobre el tema puedes acudir a diferentes instituciones de Madrid que se dedican a difundir la cultura árabe de Madrid y su pasado. Como por ejemplo, la Casa Árabe que se encuentra junto al Parque del Retiro.
Y si queréis contactar con nosotros:
contacto@lugaresmadrid.com
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